DELTA DEL OKAVANGO

¿Sabéis que en el siglo XIX los geógrafos pensaban que desde el Kalahari hasta el Sahara sólo había desierto y arena? Era la época de las colonias y un inglés muy políglota, el Sr.Livingstone, amante de las lenguas y las aventuras, consiguió interpretar a los nativos cuando les aseguraban que más allá del Kalahari había agua. ¡Y vaya si había agua! Descubrieron que desde las montañas de Angola nacía un río que al llegar a Botswana formaba un delta, el delta del río Okavango. Y este delta no llega al mar, desaparece en las áridas tierras del desierto del Kalahari, es el único delta en el mundo que no acaba en una gran superficie marítima…¿no es alucinante?

Y con una historia así, ¿quién no quiere conocerlo? Nosotras sí, así que nos metimos en una lancha que nos llevó a un puerto en el río donde nos esperaban Rafic (the cooker), Murtan (the guide), Gali (the young pooler) y Patricia (the woman pooler). Y ahí empezó nuestra aventura por los canales del delta en Mokoro, una pequeña embarcación de madera que sirve como transporte en las habitadas aguas del delta.

El parque formado por el Delta del Okavango y la extensión de Moremi tiene una superficie de 16000 km², es sabana africana y en él viven centenares de especies de animales y pájaros. Pasamos ahí 3 días acampados en una de las islas que forman el delta, haciendo excursiones para observar a las animales y conviviendo el resto de día con el equipo. Lo más espectacular, la salida y la puesta del sol. Lo más emocionante, ver a los animales salvajes en su hábitat natural. Lo más excitante, bañarte en agua repletas de flora y fauna…¡por suerte no nos visitó ningún cocodrilo!

Después de esta fantástica experiencia por el delta, volvimos a Maun dónde finalmente conocimos a Edurne, la “tieta” de la que tanto nos había hablado Biel, una cántabra que lleva 17 años en Maun organizando todo tipo de actividades por los diversos Parques Nacionales de Botswana al frente de su empresa África Pride. Lo que empezó con una quedada corta en su oficina acabó siendo un día muy especial junto a ella y su hijo Tom.

Gracias a ella ahora estamos en Kasane, nuestra siguiente parada, alojadas en el lodge Water Lily (eso sí, en la habitación de los guías) preparándonos para ver la puesta de sol desde el barco que navega por el río Chobe, rodeadas por el Chobe Park, elefante y hipopótamos.

Kasane está a las puertas de la frontera con Zambia y Zimbabwe y aquí surge nuestra siguiente duda que queremos que nos ayudéis a resolver…

¿Desde qué país visitamos las cataratas Victoria?

(El lado de Zimbabwe está más alejado de las cataratas, pero las panorámicas son mejores. Desde el lado de Zambia casi puedes tocar el salto de agua y el acceso es más económico, pero la perspectiva es más limitada.)

¡En dos días estaremos ahí, así que necesitamos vuestra ayuda urgentemente!